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China y los mecanismos del mercado.

Martes, 29 de mayo de 2012 Comments off

Fue en Durban ( COP 17), el pasado diciembre, donde China desplegó una serie de iniciativas para demostrar al resto de los países, sobre todo a los emergentes y a los menos desarrollados, en particular a los africanos, sus nuevas políticas de lucha contra el cambio climático.

El gobierno chino tuvo una participación muy importante en esta última conferencia sobre cambio climático sobre todo porque por primera vez, presentó un despliegue informativo significativo en un pabellón propio, muy bien dotado de servicios y salas de conferencias.

Allí se presentaron una serie de “side-events” donde se explicaba la agenda futura de China en su lucha contra el cambio climático.

En uno de ellos se presentó su nuevo plan piloto sobre los proyectos domésticos de reducción de emisiones, en el cual estuvieron presentes representantes de gobiernos regionales (provincias Chinas) y de importantes ciudades.bandera-china

Yo siempre había visto y oído a representantes chinos en todas las conferencias de cambio climático anteriores que hablaban y entendían perfectamente el inglés, pero por primera vez, algunos de sus representantes regionales y locales, solo hablaban el idioma de su país y necesitaban traducción. Una señalm, a mi parecer, de que el tema del cambio climático ha entrado en la agenda de los objetivos de estas autoridades y no solo de los representantes de China en las negociaciones internacionales.

El gobierno chino es consciente que los temas de la energía, el cambio climático y el desarrollo económico y social están directamente relacionados entre sí en un mundo global como el actual.

China ha tenido en ejecución el 11º Plan Quinquenal (2006-2010) con el objetivo de reducir la intensidad energética de su economía en un 20% y el aumento del uso de sus energías renovables del 6% al 10%, todo ello bajo el principio estricto de una dirección y control de arriba abajo en sus distintas autoridades nacionales, regionales y locales.

El actual gobierno chino reconoce las dificultades que ha tenido en el despliegue de este último plan quinquenal con este tipo tan planificado de dirección de arriba abajo (top-down).

Para el actual 12º Plan Quinquenal (2011 a 2015) el gobierno ha establecido la posibilidad de desarrollar planes piloto de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de manera experimental en algunas grandes ciudades y provincias chinas muy industrializadas.

Estos siete planes pilotos están siendo probados en las ciudades de Beijín, Shanghai, Tianjing y Chongoing y las provincias de Hubei y Guangdong bajo la supervisión de la “comisión de desarrollo nacional y reformas”.

Se pretende iniciar un camino que, si tiene los resultados esperados, lleve a la posibilidad real de crear un verdadero mercado nacional chino de derechos de emisión al estilo del “cap and trade” europeo adaptado a las circunstancias de China.

El objetivo es tener un plan piloto a nivel regional a pleno funcionamiento para el año 2014 y uno a nivel nacional de toda China para el año 2016.

Las autoridades locales y regionales pueden escoger que tipos de medidas ponen en marcha dentro de los objetivos globales asignados y podrán entre ellos negociar (comprar o vender) los créditos de carbono que les falten o les sobren.

Al mismo tiempo que se establecen estos planes territoriales, también se están probando mediante planes pilotos, planes sectoriales basados en grandes sectores de emisión y entre ellos es de remarcar el sector energético basado en un uso intensivo del carbón y que deberá ser cada vez más eficiente y menos emisor, así como en el sector de la construcción.

Dos billones de metros cuadrados de edificios nuevos se construyen en China cada año y un 80% de los edificios actuales son considerados no eficientes energéticamente, con lo que ello afecta a sus emisiones asociadas.

China ha sido la-gran-muralla-chinadesde su inicio un importante productor de mecanismos de desarrollo limpio (CDM) establecidos dentro del protocolo de Kioto, así se han registrado de manera satisfactoria más de 1.500 proyectos en el registro correspondiente de las Naciones Unidas, lo que representan un 45 % del total a nivel mundial.

Estos mecanismos sin embargo, no incentivan suficientemente y de manera efectiva, la competición dentro de sectores,  ni a nivel territorial y no sirven para reducir aún coste eficiente la reducción de la intensidad energética doméstica de China.

China tiene el dilema planteado de establecer límites de emisiones absolutas o reducciones basadas en la intensidad energética,  y los temas relacionados con los diferentes mecanismos de mercado le pueden servir para tomar las decisiones adecuadas a sus necesidades.

Es posible también que prueben a usar impuestos sobre el uso de energía que emitan gases de efecto invernadero siguiendo el ejemplo de Australia.

A China le falta experiencia en el uso de mecanismos de mercado pero sus actuales políticas son favorables al uso de estos instrumentos siempre que se acaben adaptando a sus actuales políticas económicas y sociales.

El futuro de los mercados de derechos de emisión en el mundo, dependen también del resultado de estos planes piloto a nivel de un país que es el principal emisor mundial de gases de efecto invernadero. Y esto no solo por sus necesidades propias sino también porque China se ha convertido en la actual “gran fábrica”  del mundo globalizado y ello tiene sus consecuencias asociadas.

Josep Garriga Sala
Economista y experto en cambio climático.

¿Qué podemos esperar, razonablmente, de la Cumbre de Durban?

Lunes, 26 de septiembre de 2011 Comments off

Desde la conferencia del cambio climático de las Naciones Unidas de diciembre de 2010 en Cancún (México) han cop17tenido lugar unas series de reuniones, que más tarde analizaré, y al mismo tiempo estamos inmersos en unas circunstancias determinadas, a nivel global, por una crisis financiera y de la economía real que deberemos tener en cuenta a la hora de establecer una razonable previsión sobre los resultados esperados de la próxima conferencia que se celebrará en Durban (Sudáfrica) el próximo diciembre.

El principal foro de discusión sobre el futuro de un acuerdo global y ambicioso acorde con las necesidades de reducción de las emisiones a escala global es el grupo de trabajo dentro de la Convención del cambio climático ( W.G.L.C.A.) llamado de la acción  cooperativa a largo plazo donde están representados casi la totalidad de los estados que forman las Naciones Unidas.

Han tenido lugar dos sesiones en Bangkok, el 3 de abril y en Bonn  el pasado 9 de junio.

Las conclusiones oficiales de los presidentes del grupo de trabajo han estado publicados en los documentos FCC/AWGLCA/2011/11 y 12 con fecha de 31 de pasado agosto.

Así mismo está prevista una tercera reunión en Panamá, los próximos días 1 a 7 de octubre con el orden del día ya propuesto en los documentos antes mencionados.

De estos “reports” se puede deducir que las discusiones y toma de posiciones de los diferentes actores principales de las negociaciones no han variado sustancialmente desde Cancún.

Estamos ante una especie de círculo vicioso, donde cada uno está dispuesto a hacer algo, que no concreta, a cambio de que los demás hagan algo bajo el principio de que nada está cerrado en una negociación hasta que todo está acordado.

Algunos países como Japón, Canadá y Rusia han declarado que no están dispuestos, de entrada, en adquirir compromisos vinculantes para un segundo período del protocolo de Kyoto a partir de 2012.

Estados Unidos continúa anunciando que no aceptará las reglas de otro protocolo de Kyoto ya que este no lo ha ratificado ni piensa hacerlo. Las políticas de Obama anunciadas en Copenhague no están en fase de posible ejecución, al menos en su actual mandato, de manera satisfactoria.

Europa sigue con su política de cambio climático, ya anunciado, pero ello no es suficiente para luchar contra el cambio climático a nivel global.

La crisis financiera actual, de ámbito mundial, aunque especialmente localizada en Europa y Estados Unidos, puede ser en el futuro inmediato más extensa y convertirse en una recesión mundial de los países desarrollados y de los países emergentes.

Ello no ayuda a la negociación internacional sobre cambio climático, ya que el empleo, la economía y la solvencia financiera en general , son los problemas prioritarios de muchos estados a corto y medio plazo.

De Durban podemos y debemos esperar el fortalecimiento de los mecanismos creados en Cancún : El mecanismo tecnológico, el Comité de adaptación, y el despliegue del importante Fondo Verde del Clima.

En resumen, Durban, es un paso más, después de Cancún, para intentar poner los cimientos necesarios para lograr un acuerdo global que incluya a todos los estados relevantes a nivel mundial que pueda de manera efectiva, poner límites al aumento de la temperatura global y a un necesario proceso de adaptación.

Josep Garriga Sala
Economista. Experto en Cambio Climático

El Atlas de la polución: las emisiones de CO2 en el mundo

Jueves, 17 de febrero de 2011 Comments off

atlas-co2Hace unos días el periódico británico THE GUARDIAN publicó un estudio gráfico sobre los datos publicados por  ” US energy information administration” con información correspondiente al año 2009 y sobre las emisiones del consumo de energía en todo el mundo (ver mapa) .

 Es de destacar que por primera vez, en el año 2009, ha tenido lugar un ligero retroceso de las emisiones del sector energético en su conjunto a nivel mundial: 0,1% sobre las emisiones del año 2008.

El mismo gráfico da fe de la importancia, cada vez más grande, de la China en este contexto, ya que se convierte en la mayor emisora del planeta con un augmento del 13,3% (año 2009 sobre 2008) y de un incremento del 170% (año 2009 sobre año 2000). Estados Unidos en el mismo año 2009 ha tenido una reducción del 7% sobre el año anterior y Europa en su conjunto también ha reducido sus emisiones del consumo de energía en un 6,9% , todo ello en parte debido a la crisis que el mundo está sufriendo, sobre todo en los países más desarrollados.

Sin embargo tenemos que recordar que las emisiones debidas   a  la  combustión  de   los   combustibles   fósiles (carbón, gas y petróleo) son una parte, muy importante, pero no el conjunto de todas las emisiones ha considerar ya que faltarían las correspondientes a la gestión de los residuos, los disolventes, la agricultura, la ganadería, los clorofluorcarbonados y la parte industrial no procedente del consumo de combustibles fósiles; así mismo tendría que considerarse las emisiones netas de la gestión de la tierra, sus transformaciones, y el sector forestal.

 Para tener una visión de conjunto de las emisiones netas de todos los gases de efecto invernadero del mundo, deberíamos tener en consideración los datos facilitados por las Naciones Unidas, a través de su Secretaría de cambio climático con sede en Bonn.

 Por una parte tenemos los datos de los países más desarrollados que forma el anexo 1 del Convenio Marco de las Naciones Unidas, son 41 Estados y los últimos resultados fueron facilitados en Cancún el pasado diciembre a través del documento ( FCCC/SBI/2010/18).

 Para este conjunto de países las emisiones del año 2008 sobre las del año 1990, han disminuido en un 6,1 % , si no se  tienen  en  consideración  las  emisiones  del   apartado ” uso de la tierra, su transformación y el sector forestal”, si se tienen en cuenta estos,  la disminución sería del 10,4 % , de lo que se deduce que en su conjunto,  posiblemente ayudado por la crisis actual, estos países estarían en la senda de poder cumplir sus compromisos.

 ¿Pero que pasa en el resto de países que no forman parte de este conjunto de países que tienen los inventarios de emisiones al día?

 Pues que los datos oficiales de las Naciones Unidas son del año 2005, y sobre unos inventarios bastante atrasados en el tiempo: China, India, Brasil, Indonesia son del año 1994, y para Sudáfrica del año 1995, son datos pues poco representativos de la realidad actual, sobre todo en algunos países donde los últimos años, han mejorado sustancialmente sus niveles de desarrollo económico.

 Así, delante de la dificultad de tener unos datos al día y globales de emisiones netas de importantes países del mundo se ha optado por tener en consideración las emisiones de sus sectores energéticos y estimar lo mejor posible el resto de emisiones para sí tener una visión más amplia y completa de la situación actual a nivel global.

 Los datos de las emisiones de estos países en cuanto a las emisiones de su consumo de energía se pueden obtener de diferentes fuentes, así una de las más acreditadas es la suministrada por la Agencia Internacional de la Energía, que en su edición del 2010 facilita información completa a nivel mundial con datos del año 2008.

 Un hecho significativo de los datos de esta agencia es que hace notar, como hacía el anterior estudio, que por primera vez las emisiones del sector del consumo de energía son mayores las del conjunto de los países no desarrollados (no anexo 1) que en los países desarrollados del anexo 1.

 Todas estas consideraciones ponen de manifiesto la necesidad de negociar un acuerdo global a nivel mundial de reducción de emisiones de todos los países del mundo y no solo de los países desarrollados, cada uno dentro de sus posibilidades y responsabilidades.

 El papel de China, India, Brasil, Sudáfrica (El grupo BÁSIC) y es clave así como el de los Estados Unidos, Canadá, Australia. Japón, y la Unión Europea.

 Un último punto, que no deberíamos pasar por alto: Una gran parte de las emisiones de países exportadores, como es el caso de China, se deben a mercaderías fabricadas en este país, pero que en su mayor parte son consumidas en Estados Unidos y en la Unión Europea . Este es un tema sobre el que más adelante deberíamos reflexionar.

 Josep Garriga Sala
Economista y experto en cambio climático

La conferencia de Cancún sobre el cambio climático

Miércoles, 22 de diciembre de 2010 Comments off
Josep Garriga.
Economista. Experto en Cambio Climático.

Se esperaba poco de esta reunión, dado el precedente de la de Copenhague

Cristiana Figueres en la COP16 de Cancún

Cristiana Figueres en la COP16 de Cancún

del año pasado, pero al final de 15 días de intensas negociaciones se ha conseguido avanzar dentro del marco de las Naciones Unidas, hacia un posible acuerdo, a nivel mundial, sobre cambio climático con compromisos vinculantes por parte de todos los estados en los próximos años, (posiblemente no menos de dos a tres años).

 La confianza entre los países desarrollados por una parte y los considerados en vías de desarrollo (China, India, Brasil, Sudáfrica) y los países más pobres y más vulnerables (entre ellos los africanos y los estados que son pequeñas islas), se ha recuperado en gran parte gracias a los buenos oficios del país anfitrión,  México, y a la eficaz mediación de las Naciones Unidas, sobre todo por parte de la nueva Secretaria Ejecutiva de cambio climático, Sra. Dña Cristiana Figueres .

 Los “observadores” de la negociación: Universidades, Centro de Investigación y científicos, gobiernos locales y regionales, sindicatos, grupos ecologistas, grupos indígenas, grupos religiosos, representantes del entorno empresarial,  de los mercados financieros e instituciones aseguradoras, han tenido un papel más importante en Cancún que en las últimas reuniones de negociación sobre el cambio climático.

Los acuerdos de Cancún, en forma de un paquete de decisiones, todas ellas interrelacionadas, tienen como denominador común, la voluntad de avanzar hacia un acuerdo futuro que deberá concretarse en Durban (Sudáfrica) el próximo año y que ha sido aprobado por todos los estados del mundo (193) con el voto desfavorable de Bolivia que ha constado en el acta final, pero que no ha servido de veto al acuerdo de ámbito mundial.

Lo que no pudo aprobarse en Copenhague en el marco de las negociaciones oficiales de las Naciones Unidas y un poco más, se ha aprobado en Cancún.

El acuerdo político de Copenhague es ahora un paquete más completo que está avalado dentro del acuerdo marco de las Naciones Unidas, contra el cambio climático, que tienen su origen en la Conferencia sobre la Tierra del año 1992 en Río de Janeiro.

Es importante remarcar, entre muchos otros, los siguientes aspectos:

  • Las tecnologías del carbón de manera que su efecto sobre el cambio climático sean menos desfavorables, conocidas como, captura y almacenamiento de carbono “Carbono limpio”, se han convertido en una metodología que entra entre las comprendidas en los mecanismos de flexibilidad del protocolo de Kyoto, conocidas como mecanismos de desarrollo limpio, ello supone en la práctica, dar un espaldarazo definitivo a la expansión comercial de dichas tecnologías.
  •  Los programas de reducción de la deforestación (REDD+) reciben un tratamiento especial con planteamientos de compensaciones incentivadas y mecanismos de financiación adecuadas al menos en una primera etapa de puesta en marcha en muchos países no desarrollados, todo ello relacionado con metodologías de reducción de pérdida de la biodiversidad.
  •  Se ha reafirmado y concretado el paquete financiero a corto plazo (30 mil millones de dólares para los años 2010 a 2012) y a medio plazo ( 100 mil millones de dólares para el 2020) que se gestionarán y controlarán de manera provisional bajo la dirección del Banco Mundial y del GEF ( Instrumento de Gestión de las Naciones Unidas relacionadas con Fondos Ambientales).
  •  La creación de un Comité Tecnológico dentro de una red de redes tecnológicas, a nivel mundial que debe facilitar de manera efectiva la transmisión de conocimientos tecnológicos para una economía baja en carbono a nivel mundial, con fondos propios para su funcionamiento.

 Se puede decir que se ha conseguido avanzar, aunque poco, hacia el acuerdo necesario y conveniente para conseguir que el clima, a nivel mundial, no se caliente más de dos grados de promedio sobre los existentes antes de la Revolución Industrial, reconociendo que el esfuerzo debe ser de todos, aunque de manera diferenciada y en el marco de una acuerdo global dentro de las Naciones Unidas.

 También se ha reconocido el papel clave, de las empresas y sectores privados, como complemento necesario a las acciones públicas de los gobiernos de todo el mundo.

 El reconocimiento explícito, hacia la necesidad de avanzar en una economía baja en carbono, donde todas las tecnologías tienen cabida, es un avance significativo, sobretodo porque es un acuerdo global que da un claro signo de dirección a seguir a las empresas de todo el mundo que quieran continuar siendo competitivas en un mercado mundial durante los próximos años.

¿Como está el proceso de negociaciones internacionales sobre cambio climático en este momento?

Jueves, 30 de septiembre de 2010 Comments off
Josep Garriga Sala
Economista. Experto en Cambio Climático.
Después de la COP 15 de Copenhague y su acuerdo político “in extremis” entre USA, China, Brasil, India, y Sudáfrica a la que después se adherieron la Union Europea, Japón, Canadá, y casi la totalidad de los países del mundo, el proceso se ha ralentizado ya que no fue posible o no se quiso llegar ,en aquel momento, a  un acuerdo global y vinculante a escala mundial.
 
La Unión Europea ha seguido su proceso iniciado el 2008, con su plan 20+20+20 para el 2020 formado por el paquete “energía clima”con una autorregulación de sus emisiones de -20%, que no se ha concretado de momento en el -30% dada la situación de las negociaciones a nivel mundial y las reticencias de ciertos estados europeos a continuar aumentando las medidas de reducción internamente en Europa de manera unilateral, más allá de lo ya prometido.
 
La crisis financiera y de la economía real también influyen en el ritmo de las negociaciones sobre cambio climático.
 
Las Naciones Unidas han realizado, como estaba previsto en los últimos acuerdos de Copenhague, tres encuentros de negociación en Bonn, los pasados meses de Abril, Junio y Agosto, con el resultado actual de tener sobre la mesa un texto de negociación muy extenso y con múltiples posibilidades, no todas ellas compatibles entre si.
 
El tema financiero, clave en toda la negociación fue debatida en una reunión informal convocada por Suiza y México el pasado 2 y 3 de septiembre en Ginebra, donde se puso el énfasis en la necesidad de movilizar tantos recursos públicos, como procedentes del sector privado.
 
China se ha ofrecido a organizar en Tianjin el próximo 4 de octubre la última reunión preparatória de la Conferéncia de las partes, COP 16, que se celebrará el próximo Diciembre en Cancún (México), es una buena notícia que este importante país se quiera implicar directament en el proceso negociador, pero no es suficiente.
 
Los Estados Unidos están a punto de celebrar el próximo Noviembre unas elecciones domésticas que afectarán a 1/3 de los Senadores del país, precisamente donde está encallado el proceso de aprobación de una legislación doméstica sobre energía y cambio climático.
 
Las encuestas pronostican un aumento del voto para el partido repúblicano, lo que en principio parece no beneficiar el proceso de aprobación de esta ley norteamericana tan necesaria para dar seguridad y continuidad al proceso de negociación internacional.
 
La nueva directora ejecutiva del convenio sobre cambio climático de las Naciones Unidas Sra. Christiana Figueres, pronostica la posibilidad de un acuerdo a escala global sobre cambio climático para dentro de tres años, su método de trabajo se basa en ir paso a paso y sin detenerse, pero con la convicción que el proceso es irreversible.
 
Mi opinión personal es que la negociación será un proceso dificil y complicado, dada la falta de confianza entre algunos actores, con altas y bajas, con periodos de más  y menos presión, pero de todas maneras parece que es imparable y del todo necesario, ya que es un problema global que sólo puede plantearse y solucionarse con acuerdos vinculantes que afecten a todo el planeta.

Información sobre las emisiones del año 2009 incluídas en el comercio europeo de derechos de emisión: algunos comentarios

Jueves, 15 de abril de 2010 Comments off
Josep Garriga Sala.
Economista, Experto en Cambio Climático
 
La comisión europea ha publicado un avance informativo de las emisiones de las instalaciones europeas incluidas en el comercio de derechos de emisión durante el año 2009.
La información completa y contrastada se deberá dar el próximo 15 de mayo sobre la totalidad de las aproximadamente 12.000 instalaciones europeas incluidas.
En el avance se pueden ver claramente los efectos de la crisis global a nivel europeo sobre todo en el sector industrial cuyas emisiones han disminuido un 11 % sobre el año anterior, muy por debajo de lo previsto inicialmente, ya que se ha reducido muy por debajo del total de derechos de emisión concedidas a las instalaciones industriales europeas en su conjunto.
El sector industrial europeo, en su conjunto, ha tenido un superavit sobre lo previsto de 185 millones de toneladas de CO2 y el sector eléctrico también en su conjunto ha tenido una falta de derechos de 123 millones de toneladas lo que ha dado como resultado neto global europeo 62 millones de toneladas de CO2 de superavit (todo ello a la espera de los resultados definitivos y completos que se verán en mayo).
El sector industrial en su conjunto ha tenido pues un 30% más de derechos de emisión de los que en principio necesitaban.
Sin embargo estos derechos que han sobrado pueden ser retenidos para ser vendidos o usados más tarde o venderse en cualquier momento.
Sería conveniente preguntarnos si no sería ahora el momento de ser más ambiciosos en los objetivos globales europeos de reducción (pasar del 20% al 30% para el año 2020 en base a las emisiones de 1990), lo que podría contribuir a devolver el papel de liderazgo de Europa en la lucha contra el cambio climático a nivel mundial parcialmente perdido en la cumbre de Copenhague del pasado diciembre.
Así mismo, la falta de estímulos, necesarios para hacer las inversiones precisas, para bajar emisiones en el sector industrial dado el volumen de derechos que les estan sobrando es un tema que merece una reflexión adecuada.
La existencia de derechos sobrantes en general no ayuda a mantener unos precios de la tonelada de C02 en el mercado de derechos de emisión a un nivel adecuado para estimular inversiones económicas muchas de ellas a largo plazo.
Si la crisis actual provoca una parte de la reduccion de las emisiones y no se hacen las inversiones necesarias a tiempo, cuando pase la recesión actual volveremos a estar en las mismas condiciones de producción de gases efecto invernadero y nos será más dificil mantener la competitividad de la industria europea a nivel mundial. Es en períodos de crisis donde se deben tomar las medidas necesarias para estar preparados para cuando se salga de ella, todo ello pensando en que la competitividad industrial se tiene que medir en términos mundiales.
Tiene que recordarse que ello ha de ser compatible con tomar las medidas previstas para no exponer a nuestras industria a una competencia desleal por parte de paises que no están por la labor de luchar contra el cambio climático a nivel global.

La industria química y el cambio climático

Martes, 9 de marzo de 2010 Comments off
Josep Garriga Sala.
Economista y Experto en Cambio Climático.
 
 
Hoy dia más de 100.000 diferentes sustancias se usan en nuestra vida diaria que son fruto de la producción de la industria química.
 
Es dificil encontrar un sector económico donde la industria química no tenga un importante papel como suministradora de productos necesarios para su funcionamiento.
 
La industria química es una importante usuaria de energía y productos procedentes del petróleo.
 
En este contexto es muy importante el potencial de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero debidos al mejor uso de productos procedentes del petróleo y de la mejora de la eficiencia del uso de todo tipo de energía procedente del carbón, el petróleo y el gas natural.
 
Sólo como ejemplos podemos citar entre muchos otros la mejora posible en los sectores de la vivienda y el transporte.
 
Mejorar los sistemas de calefacción y de refrigeración, así como los aislamientos térmicos en las vivienda tienen mucho que ver con los productos químicos de base que utilicemos.
 
Innovar y mejorar en la posible utilización del hidrógeno como combustible en el trasporte con seguridad y eficiencia debe ser un objetivo de la industria química de los próximos años.
 
El uso de pesticidas degradables y de abonos con menores necesidades de energía y materias primas en su producción es otro ejemplo posible de mejora de las condiciones ambientales y de la lucha global contra el cambio climático.
 
Un acuerdo internacional, obligatorio para todos,  del mejor uso del mercurio es necesário y muy conveniente.
 
La quema de combustibles fósiles, principalmente carbón, es una de las más importantes emisiones de mercurio en muchos países, principalmente en plantas de producción de electricidad.
 
En muchos casos reducir la producción de contaminantes, como puede ser, entre otros el mercurio, puede ser complementario de medidas encaminadas a reducir las emisiones de gases efecto invernadero.
 
En resumen la industria química mundial tiene mucho recorrido de mejora para contribuir de manera eficaz en la lucha contra el cambio climático.
 

El primer paso que se debe dar después de la Cumbre de Copenhague

Miércoles, 27 de enero de 2010 Comments off
Josep Garriga Sala
Economista y experto en cambio climático.977056_12301298
 
El acuerdo político sobre cambio climático del pasado diciembre en Copenhague fue negociado, en principio,  por un número muy reducido de estados ( EE.UU. China, India, Brasil y Sudáfrica), pocos si, pero significativos  y  sin  la   presencia de la Unión Europea, Japón ni Rusia entre otros importantes actores internacionales en temas relacionados con la lucha contra el cambio climático en las reuniones de las Naciones Unidas. Mas tarde fue presentado a un número más numerosos de estados (26) donde sí estaban representados estos grandes actores así como representantes de todos los continentes y de algunos países muy  vulnerables del planeta.
 
Sin embargo cuando fue presentado dicho acuerdo a la totalidad de los firmantes de la Convención sobre el cambio climático, no fue aceptado por unanimidad, lo que obligó a que fuera considerado un acuerdo del que “se tomaba nota” de su contenido.
 
En realidad solo un pequeño número de estados se opusieron abiertamente durante la última reunión de Copenhague :”Venezuela, Cuba, Bolivia, Nicaragua, Ecuador, Sudán, Tubalu” El resto se adherió al acuerdo por distintos motivos.
 
El acuerdo tiene dos anexos, uno para los países desarrollados y otro para los no desarrollados, en que se pueden fijar por parte de cada estado sus compromisos de reducción ( Países desarrollados), y las acciones que de forma voluntaria piensan llevar a cabo los países no desarrollados.
 
El plazo de cumplimentación vence el próximo 31 de enero.
 
¿ Cuando estados van a acudir a cita del acuerdo de Copenhague y de que forma van a ser sus compromisos y acciones futuras?
 
Europa de los 27 ya ha decidido enviar al Secretariado de las Naciones Unidas sobre cambio climático su posición que en principio es la de reafirmarse en sus compromisos expuestos durante la pasada cumbre.
 
La Ministra Elena de Espinosa en su comparecéncia delante del Parlamento Europeo, el pasado 20 de enero manifestó el interés de todos los estados europeos en poner en práctica de forma inmediata el  contenido del acuerdo de Copenhague, el cual definió como un paso significativo que cuenta con la implicación personal de un número muy importante de jefes de estado y de gobierno de todo el mundo.
 
Esperemos pues el resultado de este primer paso que puede marcar la negociación de un acuerdo juridicamente vinculante en forma de tratado que sustituya o complemente el actual Protocolo de Kioto en un futuro que esperamos sea lo más pronto posible.
 

Sectores que se consideran expuestos a un riesgo significativo de fugas de carbono

Viernes, 15 de enero de 2010 Comments off
Josep Garriga Sala.
Economista y experto en cambio climático.
  
 
El pasado dia 8 de octubre en este mismo blog introduje una explicación de lo que representaba la problemática de la aplicación a partir del año 2013 de las directivas europeas sobre el comercio de derechos de emisión y las fugas de carbono.
 
Ahora, es del todo aconsejable hacer unos primeros comentários sobre LA DECISIÓN DE LA COMISIÓN DE 24 DE DICIEMBRE DEL 2009 publicada en el diario oficial europeo el dia 5 de enero de 2010.
 
La comisión ha decidido en plazo, antes del 31 de diciembre, dar la lista de sectores y subsectores que a su juicio y siguiendo los criterios previstos deben recibir el 100 % de derechos en forma gratuita durante los años 2013 y 2014.
 
Es de recordar que estos derechos gratuitos lo serán en tanto en cuanto a las cantidades que para cada sector deban recibir estas instalacions en el primer reparto de derechos de emisión y no deberán acudir por ello a ninguna subasta como sí deberán hacerlo otros sectores no incluídos en esta lista como pueden ser el sector eléctrico europeo.
 
Después cada año si les faltan derechos deberán comprarlos y si les sobran podrán venderlos. La decisión expone una série de considerandos que es importante evaluar y estudiar detenidamente entre ellos paso a enumerar algunos:
 
1) Todos los estudios y critérios se han efectuado teniendo en cuenta la U E en su conjunto ” a escala de la Unión”. No estado por estado, como debe ser ya que vamos a una asignación de reducción de emisiones a escala europea a partir del 2013, según el criterio aprobado en el paquete energía y clima el diciembre de 2008.
 
2) El precio del carbono resultante del escenario más pertinente és de 30 euros por tonelada, una cifra que es adecuada y ponderada.
 
3) Se tienen en cuenta la suma de los costes adicionales directos e indirectos derivados de la aplicación de la directiva que pueden dar lugar a un incremento particularmente elevado del coste de producción de un determinado producto en un sector o subsector expuesto al comercio global.
 
4) Dentro de los costes indirectos de producción afectados se tienen en consideración el coste de la electricidad basándose en el factor medio de emisión de la Unión en su conjunto para la electricidad, que para el año 2008 fue de 0,465 toneladas de Co2 por MWh.
 
En el caso del “Mix español” fue de 0,390, en el año 2009, lo que supone una cantidad un poco inferior al promedio europeo.
 
5) La comisión ha estimado, en parte las peticiones de algunos estados europeos y representantes de la indústria de ciertos sectores que habian presentado razones plausibles y justificadas después de un análisis cualitativo por parte de la comisión de estas peticiones.
 
Así se han incluído los siguientes subsectores no previstos con anterioridad: Acabado de textiles, fabricación de chapas y tableros, primeras matérias plásticas y materiales ligeros.
 
6) El subsector de fabricación de ladrillos y tejas no ha sido incluído en la lista, de momento, por razones de falta de plazos y de suficientes datos o de poca calidad de los mismos, pero volverán a ser evaluado lo antes posible para a la vista de este nuevo análisis ser incluído en esta lista en un futuro próximo.
 
Este subsector tiene mucha importáncia en nuetro país. Está pasando una fuerta crisis, y sería deseable que en un futuro fuera incluído en esta lista.
 
En resumen, creo que la comisión ha realizado un estudio en tiempo y forma de manera correcta, dado los criterios que deberian aplicar, y como resultado de ello, la indústria europea afectada por la posible fuga de carbono en su gran mayoria ha estado adecuadamente tratada.
 
Sin embargo quedan algunos flecos por concretar como el caso de la fabricación de ladrillos y tejas y otros,  que espero sean resueltos en un futuro próximo.

La conferencia de Copenhague: Un acuerdo con sabor agridulce

Miércoles, 23 de diciembre de 2009 Comments off

Josep Garriga.  Economistas Experto en Cambio Climático.

La llamada cumbre del Clima de Copenhague finalizó el pasado día 18 de diciembre con un sentimiento generalizado de decepción y alivio al mismo tiempo.
 
Decepción desde el punto de vista europeo por no haber conseguido los mínimos requisitos esperados en temas tan importantes como un acuerdo político a nivel mundial que concretara los compromisos de reducción de emisiones para los años 2020 y 2050, para el conjunto de países desarrollados. Europa ofrecía un 30% de reducción para el 2020 en base a las emisiones de 1990 si los EE.UU. Japón, Canadá y otros hacían un esfuerzo algo similar e incluso un 80 % de reducción para el año 2050.
 
Esto no fue posible debido a que el acuerdo político de mínimos conseguido fue en realidad negociado por los EE.UU, China, India, Brasil y Sudáfrica, los cuales no querían concretar el esfuerzo de reducción de cada uno de ellos en un documento que les obligara aunque no fuesen este jurídicamente vinculante.
 
El actual acuerdo de Copenhague solo especifica que los paises firmantes se compromenten a reducir sus emisiones de manera global con la finalidad de que el clima mundial no sobrepase en dos grados la temperatura media con respecto a la que había antes de la revolución industrial, pero no especificando como lo harían, sino abriendo la posibilidad de que los estados firmantes lo especifiquen en una comunicación a Naciones Unidas antes del 31 de Enero de 2010.
 
Otro tema muy controvertido que finalmente se anuncia con mucha vaguedad es el referido al control y verificación internacional de las acciones de reducción de cada estado firmante del acuerdo.
 
El acuerdo prevé un control doméstico, o sea interno de las acciones por parte de los países en vías de desarrollo que deberán comunicarlo posteriormente a las Naciones Unidas, sin embargo si se admite un cierto control i verificación internacional de las acciones de reducción que se realicen si estas han tenido ayudas económicas de terceros países.
 
Este asunto fue clave en la larga negociación de la última noche por parte de EE.UU. que solo se resolvió sin un suficiente grado de transparencia dada la dura posición de negociación de China en esta cuestión que argumentaba que se inmiscuía en su soberanía nacional.
 
El acuerdo también especifica la posible utilización de instrumentos de mercado como posible herramienta para cumplir los compromisos o acciones de mitigación por parte de los estados firmantes. El sentimiento de alivio con que finalizó la conferencia es fruto de la constatación de que finalmente la cumbre no tenía unos resultados que suponían una ruptura del proceso como hacía suponer la última noche de negociación.
 
Ha sido positivo la implicación de toda la sociedad gubernamental y civil, con 40.000  inscritos, muchos de los cuales no pudieron, sin embargo, participar en las reuniones del Bella Center ya que su capacidad operativa era de 20.000 personas, y la presencia de 141 jefes de estado en la reunión, la de mayor presencia de estos fuera de las Naciones Unidas en su sede de Nueva York.
 
El mundo de los negocios ha estado muy bien representado y activo, dando la sensación de haber asumido en su mayor parte la necesidad de ir hacia una economía baja en la utilización de carbono, con todas las decisiones de actuaciones y inversiones futuras que ello supone sobre todo y prioritariamente en el mundo de la energía, el transporte y la producción de alimentos.
 
Se ha constatado  que el liderazgo mundial en el lucha contra el Cambio Climático pasa a ser de los EE.UU., junto a China, India y Brasil, siendo los europeos unos compañeros más de viaje, pero no los actores clave en  la toma de decisiones importantes a nivel mundial en temas de cambio climático.
 
Europa va a continuar con su política de cambio climático especificado en el paquete “Energía y Cambio climático” aprobado el pasado diciembre de 2008, pero sabiendo ahora que otras potencias mundiales se han comprometido, aunque de momento no suficientemente, en el mismo proceso, Europa tendrá pues que aprovechar este momento para posicionarse en poner al día tecnologías verdes.
 
En resumen el proceso continúa  a una velocidad de crucero más reducida, no a la velocidad europea, pero al mismo tiempo con la satisfacción de comprobar que otros estados muy importantes y decisivos han introducido dentro de su agenda política de manera prioritaria la lucha contra el cambio climático.
 
Esperemos que los proximos meses el Senado norteamericano de el espaldarazo definitivo a este proceso. Ello supondría la entrada masiva del mundo financiero y de los negocios en el tema y puede desencadenar junto a la existencia de un mercado de derechos de emisión a nivel mundial un cambio cualitativo en la búsqueda de soluciones eficaces y efectivas en la lucha contra el cambio climático a nivel mundial.